¿Qué es la Biotecnología y por qué ha crecido exponencialmente su rentabilidad?
La pandemia ha evidenciado la importancia de la Biotecnología, un sector cuya rentabilidad ha crecido exponencialmente en los últimos años. Especialmente porque se ha enfocado en dos áreas imprescindibles: la sanidad y la transición hacia un planeta más “verde”.
El término Biotecnología está cada vez más presente; especialmente a raíz de que la pandemia haya activado las alertas poniendo en primer plano este término. El COVID-19 nos ha puesto en el foco que la biotecnología es imprescindible para cubrir las carencias de nuestro sistema sanitario nacional.
¿Pero qué es exactamente la biotecnología? La biotecnología es la ciencia que estudia cómo las células vivas pueden manipularse o desarrollarse para extraer de ellas fines específicos. Por ello una de sus ramas más importantes es la ingeniería genética, además de por supuesto la medicina en general.
La biotecnología moderna se divide en cinco ramas: humana, ambiental, industrial, animal y vegetal, y su investigación y uso es imprescindible para combatir enfermedades, reducir nuestra huella ecológica y ahorrar energía; desarrollar nuevos productos farmacéuticos... Pero su aplicación es tan precisa que un mal uso puede conllevar consecuencias tan desastrosas como una pandemia sanitaria.
En los últimos años el término ha cobrado protagonismo e invertir en biotecnología se ha hecho cada vez más rentable. Hitos históricos como el descubrimiento del uso antibiótico de la penicilina -en 1928 por el bacteriólogo escocés Alexander Fleming-; la creación de la oveja Dolly, primer clon de un mamífero, en 1997; la creación de un borrador del mapa del genoma humano que ubica más de 30.000 genes, en 1998, y un largo etcétera son ejemplos de los avances de este sector.
En España, una de las entidades más implicadas en Biotecnología es la Asociación Española de Bioempresas, AseBio, quienes agrupan y representan los intereses de empresas, asociaciones, fundaciones, universidades y centros tecnológicos y de investigación que desarrollan actividades en el ámbito de la biotecnología en España. Se definen como “una comunidad comprometida con la ciencia y la innovación como motor de desarrollo económico sostenible y bienestar social”. Y para ello han creado “un ecosistema inclusivo”, basado en la “cooperación” y abierto hacia todos con el objetivo de “encontrar soluciones innovadoras para los desafíos sociales y generacionales que tenemos por delante”.
El impacto a nivel económico de la biotecnología en los últimos años hace que hayan crecido de manera exponencial las inversiones, puesto que han crecido las investigaciones. Desde los años 90 el éxito ha sido imparable, apostándose por la creación de un tejido empresarial y profesional de alta cualificación, con gran importancia de los acuerdos internacionales.
La situación pandémica ha focalizado que la situación sanitaria, en primer lugar ante la emergencia, pero también después abarcando todo tipo de enfermedades, sea el primer foco de la biotecnología, el primero campo a investigar.
Pero cada vez cobra más fuerza otro campo, y es el de la trasición hacia un mundo más comprometido con el medioambiente. Esta transición verde, enfocada hacia la Agenda 2030, solo puede entenderse desde la biotecnología. Los 193 estados miembros de la ONU han aprobado esta Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, un plan que busca alcanzar una prosperidad respetuosa con el planeta y que solo podrá ser llevado a cabo invirtiendo en biotecnología.