Aún hoy lo sigue siendo eso no podemos negarlo, pero hemos de admitir que desde hace unos años nuevas tendencias están llegando hasta nosotros con el fin de desbancar a la hidratante del pódium y en gran medida lo están consiguiendo.

Hace algún tiempo se puso de moda lo que conocemos como BB cream –Blemish balm-. Erróneamente se llevó, a través de la publicidad, a pensar a la mayoría de las mujeres que este tipo de crema estaba pensada para cualquier piel, tuviesen la edad que tuviesen y fuesen del tipo que fuesen. Pero como ya hemos desvelado, esto no es así, la BB cream está diseñada específicamente para un tipo de piel joven que tiene unas necesidades muy concretas. Este tipo de producto corrige el tono aportando luz y color, pero solo consigue unos buenos resultados en una piel poco desgastada por el paso del tiempo. Las jovencitas pueden encontrar en ella un buen sustitutivo de la hidratante e incluso de la base de maquillaje; pero cuando una mujer que pasa de los 30 la utiliza el efecto que produce no es el deseado.

Las pieles maduras –a partir de 30- tienen sus necesidades concretas y no podemos obviarlas. Al igual que ya no nos encontramos favorecidas en los mismos maquillajes y estilismos que las de chicas de 20, sus productos tampoco se adaptan bien a nuestra piel.

Con el boom de la BB cream y la aceptación de que esta se quedaba muy corta en la corrección de los signos de las pieles maduras, salió al mercado un nuevo producto llamado CC cream. Este tipo de crema correctiva mucho más efectiva de ahí sus nombre “Colour Correcting”, ha propiciado la revolución de la rutina de belleza. Sorprendentemente este producto nos proporciona numerosas ventajas a las que no estamos dispuestas a renunciar.

Las CC cream no solo hidratan y dan color sino que corrigen el tono y las arrugas, dos de las principales preocupaciones de las mujeres en torno a su piel. Su gran poder para disimular los defectos y tapar rojeces y manchas las convierte en un producto más que necesario para el día a día, sobre todo si sois de las que no os gusta llevar base de maquillaje a diario. De uso sencillo no requieren más que ser extendidas para dotar a la piel de luminosidad y una dosis de juventud.

Según las necesidades de cada mujer es recomendable usar una marca u otra de CC cream. Nosotros hemos hecho una selección de tres para que seas tú la que elija cual beneficiará más a tu tipo de piel.

En primer lugar para aquellas a las que les preocupan las rojeces, la cc cream ideal es la de la firma La Roche Posay llamada CC Rosaliac. En ella encontrareis una gran aliada, que os hará sentir más guapas moldeando el tono de vuestro rostro.

Todas aquellas que quieran luchar con los signos de la edad deben usar la cc cream q10 de Nivea. Esta es muy potente en la lucha contra las arrugas y también ayuda a mejorar el aspecto de las imperfecciones.

También puede ocurrir que a pesar de pasar de los treinta sigas sufriendo alguno de los males de los rostros adolescentes, como son los poros abiertos y la piel grasa. En ese caso no te preocupes, también hay una cc cream para ti. Es de The Body Shop y te proporcionará un resultado más matificado, cerrando visiblemente tus poros.

¡La era de la CC Cream ha llegado a nuestra piel para quedarse!