Circulan por las redes sociales ‘memes’ que dicen que después del primer capítulo, ‘Asalto al Capitolio’, y del segundo capítulo, ‘Nevada Filomena’, la serie recién estrenada ‘2021’ es un fiasco. Cierto además que venimos de un 2020 desastre total, con la economía por los suelos y una pandemia que ha arrasado con nuestra hasta entonces vida cotidiana.

Si a esta un tanto desastrosa situación le plantamos un ‘Blue Monday’, normal que tendamos a deprimirnos. El término ‘Blue Monday’ fue acuñado por el psicólogo Cliff Arnall para definir el estado de ánimo generalizado en el tercer lunes del mes de enero. Se habló de este “lunes triste” por primera vez en el año 2005, cuando este psicólogo marcó esta fecha como un sumatorio de condicionantes que no daban buen augurio. La conocida como ‘cuesta de enero’, que tradicionalmente cuesta escalar debido a unas navidades marcadas por más o menos excesos, regalos y comidas copiosas, es el primer desencadenante. Los propósitos de año nuevo empiezan a esfumarse tras tres semanas de no haber podido tachar ninguno. Y, además, es lunes, cuando aún tenemos toda una semana de trabajo por delante.

A esta situación generalizada se le suman los tiempos de pandemia en los que vivimos, lo que nos hacen prever un ‘Blue Monday’ de este 2021 aún más ‘Blue’. Normal que no tengamos ningún interés por seguir viendo capítulos de esta serie... Sin embargo, como nos gusta ir a contracorriente, vamos a proponerte cinco cosas para que seas feliz pese al ‘Blue Monday’.

1. La risa. El eterno Fofito, uno de los payasos más queridos de la tele, difundió estas navidades un vídeo en el que hablaba de la importancia de la risa. “Los niños y las niñas se ríen por lo menos 300 veces al día. En cambio, los adultos apenas 25. ¿Será porque cuando nos hacemos mayores nos ponemos más serios?”, se preguntaba el payaso. Fofito nos animaba a contagiarnos de los niños, para los que la alegría es "su estado natural", gracias a que "disfrutan del presente". Así que reírnos es nuestra primera recomendación para alegrar este ‘Blue Monday’, y si ves que la estrategia de campanilla no te sirve y “pensar en cosas bonitas” no te funciona, ve al espejo y fuerza la risa, di ‘Jajaja’, porque tras ese primer intento, tus músculos comenzarán a trabajar y la risa vendrá sola, y con ella, llegará la alegría.

2. El café. O el chocolate. (O cualquier otro sustitutivo -legal- de las mismas características). Comer es sin duda uno de los grandes placeres terrenales. Pero no hace falta una gran mariscada (aunque si quieres...). A veces solo con un bocadito de una exquisita onza de chocolate negro hace despertar tu ánimo. Saborear el chocolate hace que el cerebro, que es muy inteligente, produzca endorfinas, incidiendo en la sensación de felicidad. ¿Quién necesita sexo cuando tenemos chocolate? (Y sin riesgo de contagio). Como mucho, riesgo de engordar, aunque si es chocolate negro aún acarrea más beneficios. Pero si el chocolate no te motiva, tampoco importa. Piensa qué te comerías en estos momentos, degústalo con tu mente y luego has real el placer y métetelo en la boca. Seguro que con la barriga llena el lunes se ve menos triste. Has caso al refranero español: ‘Barriga llena, corazón contento’.

3. La música. No es casualidad que en pleno confinamiento la música se convirtiera en nuestro mejor aliado. Los intérpretes, pese a pasar por uno de sus momentos más delicados tras la suspensión de sus conciertos, nos regalaron sus voces y su talento y llenaron nuestras redes sociales de música gratuita. El tema ‘Resistiré’ se convirtió en himno nacional y a las 20 horas cada tarde salimos al balcón a aplaudir y a cantar. Está demostrado que la música levanta el ánimo, así que si te has levantado de bajón pon tu ‘playlist’ favorita, una con marcha (no a Ismael Serrano, al cual adoro pero no es el mejor para levantar el ánimo) y ponte a cantar y a bailar como si estuvieras solo en el mundo. ¡Que la música no pare!

4. La vacuna. O también llamada, la esperanza. ¿Qué nos ha hecho llegar hasta esta tercera ola? La irresponsabilidad. Sí, cierto. Pero sobre todo el COVID-19, su presencia y expansión es lo que ha provocado la pandemia. Pero si bien 2020 estuvo marcado en todos sus poros por el virus, también es cierto que el año, antes de despedirse, nos dejó las primeras vacunas. Primeros vacunados que, casualmente hoy, se han puesto la segunda dosis. El coronavirus ya está dando sus últimos coletazos. Desafiante y violento sí, pero es solo su actuación final. El mundo entero ha aunado sus recursos para encontrar remedio. La unión hace la fuerza y la vacuna está aquí. Solo nos queda esperar nuestro turno para vacunarnos. Que el virus vaya debilitándose y que en unos meses, o unos años, este presente sea un mal recuerdo que, al menos, nos dejó la enseñanza y la oportunidad de convertirnos en mejores personas.

5. Y hablando de personas, una persona es nuestra quinta razón para ser felices. Y esa persona eres tú. Sí, tú. Tú debes ser y eres la persona más importante de tu vida. Estás vivo, has superado un año de pandemia, los contratiempos y tortazos de la vida; las desilusiones y los fracasos. Lo has superado y ahora eres más fuerte y más valiente. ¿No es acaso ese, estar vivos, la mejor razón, el mejor motivo para ser felices?