La Sociedad Española de Otorrinolaringología y Cirugía de Cabeza y Cuello ha dado un dato este 3 de marzo, jornada en la que se conmemora 'Día Mundial del Cuidado del Oído y la Audición'. La entidad ha advertido de que cerca del 60 % de los casos de pérdida de audición en la infancia podrían prevenirse con medidas como el tratamiento temprano de la otitis media o la vacunación frente a la rubéola y la meningitis.

Es por ello que en esta jornada han hecho especial hincapié en que se aborde la pérdida de audición y las enfermedades del oído solo cuando aparecen, sino de manera preventiva desde la infancia.

“Una de cada cuatro personas presentará problemas auditivos en 2050 y 700 millones de personas necesitarán atención otológica y para mejorar su audición”, según datos de la Organización Mundial de la Salud  (OMS). Además se estima que “un tercio de la población mundial y el 75 % de los habitantes de ciudades industrializadas padecen algún grado de sordera o pérdida auditiva causada por exposición a sonidos de alta intensidad”, según datos de la SEORL-CCC.

Ante esta perspectiva es imprescindible actuar desde edad temprana. Evitar la excesiva exposición a ruidos intensos es uno de los principales llamamientos. El límite de ruido aceptable para el oído humano es -según la OMS- de 65 dB. Esto es, explican desde ComSalud, el equivalente al de una aspiradora. “Y pasa a ser doloroso a partir de los 125 dB, por ejemplo, el producido por un taladro”, añaden.

Una mala alimentación también es un factor que influye en la pérdida auditiva. Es necesario que los alimentos que consuman los menores sean ricos en potasio y vitaminas A, C y E entre otras, ya que de lo contrario, los déficits específicos de micronutrientes pueden no fortalecer el sistema inmunológico y aumentar en consecuencia las infecciones.

Por otro lado, el consumo excesivo de fármacos ototóxicos es otra de las causas principales de los problemas auditivos en los adultos. Los bastoncillos para limpiar el oído tampoco son recomendables según han alertado desde hace años los pediatras.

Otras recomendaciones, especialmente entre la población infantil, es proteger su cabeza y oídos del viento y del frío para evitar otitis. Así como vigilar durante el baño que no le entre agua en el conducto auditivo y mantenerles bien secos los oídos.

Durante esta jornada, organizada por la Federación Española de Personas con Hipoacusia (EFHOH), la Asociación Europea de Audioprotesistas (AEA) y la Asociación Europea de Fabricantes de Aparatos para la Audición (EHIMA), se han puesto de nuevo sobre la mesa todas estas recomendaciones.

El objetivo es “concienciar sobre la importancia de su cuidado, de una escucha segura y sensibilizar a la población para que se realice revisiones auditivas periódicas”. Porque, aunque las personas son cada vez más conscientes de estos cuidados, 278 millones de personas en todo el mundo padecen pérdida auditiva.