“La verdad es que nunca me gustó la música de Pau Donés o Jarabe de Palo (a pesar de tener varias canciones de esas que no puedes sacarte de la cabeza), pero sus mensajes en ‘Eso que tú me das’ no pueden ser más top”. Este era uno de los centenares de mensajes que circulaban en las redes -en este caso en Twitter- el pasado domingo mientras se emitía el documental en el que el presentador Jordi Évole realiza al músico Pau Donés su última entrevista.

El cantante falleció el 9 de junio de 2020 a los 53 años, a consecuencia de un cáncer de colon diagnosticado cinco años atrás. Dos semanas antes de su muerte fue entrevistado por Évole, una entrevista que se recoge en el documental ‘Eso que tú me das’ y que se convirtió desde su estreno más que en una carta de despedida ante la muerte, en una lección para disfrutar y aprovechar la vida que nos quede por vivir.

El 30 de septiembre se estrenó en el Festival de cine de Málaga para pasar después por el circuito de cines, convirtiéndose en el documental más visto en cines de la última década, congregando a más de 249.000 espectadores en cines de toda España, según explicaba Atresmedia.

La expectación ante su estreno en la pequeña pantalla estaba, por lo tanto, servida. Este domingo, día 21 de febrero, la Sexta estrenaba en abierto este filme producido por Atresmedia y Producciones del Barrio. El título de la pieza rememora el título de la canción que Donés adelantó para su último trabajo discográfico con Jarabe de Palo.

“Hoy es un día muy especial. #EsoQueTúMeDas es mucho más que una entrevista o un documental. Es la despedida llena de vida que me regaló un amigo. No tuitaré durante la emisión. Solo quiero leeros. Gracias por acompañarnos en un día tan especial. Te echo de menos, Pau. Va por ti”, dejaba escrito Jordi Évole en su cuenta de Twitter antes del inicio de la emisión.

Desde los Pirineos, en el Valle de Arán, donde Donés pasó sus últimos días paseando por la montaña, colgando cuadros y comprándole queso al vecino, Évole y el músico más que una entrevista, nos muestran una conversación sobre los valores, el amor, las cosas importantes de la vida. “No creo en la pareja pero creo en la familia a tope”, defiende el músico, quien recuerda que una de las cosas que ha aprendido en su vida es que, además de querer a las personas, también debemos “demostrarlo”.

Con serenidad, el músico dice que “no quiere morirse”. “Me gustaría vivir más, al menos, hasta los 70 años”, reconoce. Pero el deseo no se le concedió. Y no por falta de ganas. “Tengo ganas de todo estos días, río mucho, lloro muro, y llorar también es una demostración de valentía, de mostrarte como eres. Me encanta llorar. Pero también tengo muchas ganas de vivir”. Unas ganas que a veces le provocaban “un enfado” con la enfermedad, pero que poco a poco iba pasando a una calma.

La calma de saber que se muere pero que aún así ha disfrutado, y mucho, de lo vivido. Por eso, lo único que podría recomendar a los demás es “que sean felices”: “No te preocupes, ocúpate, has cosas que te gusten, no tengas miedo”.

Un consejo para aprovechar el mundo, para comérselo en lugar de rumiarlo y rumiarlo. Por algo decía Donés, que fue quien llamó a Évole para proponerle esta entrevista, que el objetivo de hacerla era “poder, después de haber dado tantas entrevistas, dar la primera de verdad”.

Y como final, de la entrevista y de la vida, el agradecimiento: “Hubo momentos más duros, momentos más fáciles, pero lo he pasado muy bien. Y quiero agradecer a la vida. Estoy muy agradecido a todos los que me han acompañado en este camino”.