'Lunares Blancos', la escritura puesta al servicio de la superación
‘Lunares Blancos’ es un drama de ficción que narra la historia de un joven de 15 años que, tras la desaparición inesperada e inquietante de su hermano mellizo cuando era niño, su vida da un vuelco. A partir de ese momento, toda su adolescencia gira en la búsqueda ya no solo de su hermano, sino de su propia identidad y sitio en el mundo. Pero no solo su vida da un giro, sino también la de toda su familia, incluido su perro.
Luis Enrique Seco De Lucena, nacido en Las Palmas de Gran Canaria hace 37 años, pero residente en Ceuta desde los 11 años, es el autor de esta novela, su primer acercamiento a la literatura. Un mundo al que llegó tras pasar cerca de 20 años en unidades militares de Ceuta y tras verse obligado a dejar de lado su otra pasión: la música.
Y es que en 2010 a Luis le diagnosticaron esclerosis múltiple, una enfermedad degenerativa que lo ha obligado a quedarse en silla de ruedas. “Siempre he sido un apasionado de la música, cantautor y he tocado instrumentos como la guitarra, el cajón flamenco, el piano o el bajo, cosa que ahora por falta de movilidad no puedo tocar, aunque lo mío era y es el cante. Formé un grupo de música llamado los 'Sonakitos' y estuvimos haciendo bolos durante unos cuatro años por bodas, comuniones, fiestas privadas, recuerdo que el último que hicimos fue en el Casino de Ceuta”, explica Luis.
Pero su enfermedad lo obligó a disolver el grupo: “Cada vez tenía menos movilidad y se me metió en la cabeza el pensamiento incierto pero de manera obsesiva de que ya no sabía si aplaudían lo que cantaba o lo que me costaba subirme al escenario.
Así que una vez disuelto el grupo, el tiempo libre del que disponía, me llevo a escribir lo que iba a ser un libro de autoayuda o una autobiografía pero que al final acabó siendo una novela”.
Y fue así como entró en el mundo de la escritura. El libro puede adquirirse en la librería Krispy y ha sido publicado por la editorial Avant.
“Mi tatarabuelo, Luis Seco de Lucena Escalada, fue político, escritor, editor, periodista, miembro de la Real Academia de la Lengua y algunas cosas más, cómo fundador también del periódico El defensor de Granada. Así que escribir era una cosa que tenía pendiente por curiosidad conmigo mismo, la de descubrir si había heredado ese don al igual que el don de cantar por parte de mi segundo apellido, Heredia. El arte en mi familia siempre ha estado presente, mi tía por ejemplo, Yolanda Heredia, es artista local de aquí de Ceuta. Y mis tíos tocan la guitarra y cantan”, recuerda el autor.
Pero escribir ‘Lunares Blancos’ no solo era demostrarse si tenía ese don. Fue además un ejemplo de superación, ya que la enfermedad le limitaba cada vez más. “He tenido que aprender a escribir con la mano izquierda y con un dedo de una sola mano, fui tecleando tecla por tecla para escribir esta novela siempre sin rendirme”, reconoce el autor, quien recomienda su lectura porque es “un relato, que no dejara indiferente al lector a pesar de ser un drama de ficción, no existen los personajes de cartón, todos los hechos tienen un por qué, un cómo y cuándo, y sobre todo (y esto lo digo con conocimiento de causa) es un relato muy profundo y emotivo. Hasta el punto de tocar las fibras más sensibles de nuestro cuerpo”.