Viste de verde, pon folk y abre unas cervezas: cómo celebrar ‘St. Patrick's Day’ en casa
Si el año pasado el ‘St. Patrick's Day’ casero te pilló desprevenido -apenas llevábamos unos días confinados-, este año no tienes excusa... No habrá masificaciones ni pasacalles, pero sí fiesta, aunque sea en pijama (verde, preferiblemente). Ábrete unas cervezas y ponte música folk. ¡Feliz San Patricio!
'St. Patrick's Day' es una de las jornadas más divertidas del año y una oportunidad estupenda para pasárselo bien (¡y además es mi santo!). Se celebra cada año el 17 de marzo, con la onomástica de San Patricio, patrón de Irlanda. Como casi todas las fiestas, su origen es religioso, pero pronto derivó en una fiesta pagana, además de popular y multitudinaria, donde el color verde lo inunda todo.
Pero no solo el color verde, también la alegría por los pasacalles coloreados de verde, pero también de naranja, los colores del país. Pero aunque tradicionalmente solo se celebraba en Irlanda, con los años ha ido expandiéndose y España también se ha sumado a esta fiesta.
Los irlandeses que residen fuera de su país aprovechan esta jornada para dejar fluir la nostalgia y brindar por la patria de la que partieron. Y, al mismo tiempo, mostrar a sus vecinos de allá donde ahora residan que los irlandeses, al contrario que sus vecinos ingleses, son alegres, excesivos, provocadores y felices hasta la médula. Eso sí, la alegría la riegan con mucho alcohol en la gran mayoría de los eventos.
Y es que si algo es tradicional de esta jornada es precisamente brindar con unas cervezas negras. Así que aprovecha que la celebración va a ser en casa para abrirte esa cerveza y bebértela con cabeza y moderación, pero también con la tranquilidad de que hoy no tienes que conducir porque eso es lo mejor de las ‘pijama party’. Además, la cerveza bebida en su justa medida reduce el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares o cálculos renales, tiene alto contenido en fibra, vitaminas del grupo B... ¿Brindamos?
Y para acompañar la bebida lo ideal es festejar como un buen irlandés: con un estofado de carne, al que, en su receta tradicional, la carne se guisa con cerveza Guinness. Una exquisitez que los irlandeses suelen acompañar de un puré de patatas al que llaman ‘Champ’, y que preparan acompañado de cebollino.
Ya tenemos el menú. Lo siguiente es la vestimenta y ya hemos dicho que el verde debe ser el color predominante. Te recomendamos también decorar la casa con algunos tréboles, porque además de darle el ‘toque’ irlandés que necesitamos a nuestra fiesta, es el elemento estrella para atraer la buena suerte. A ver si llega y el año que viene estamos todos vacunados y los pasacalles vuelven a la calle.
De momento, como no hay fiesta sin música, que el folk, una de las músicas tradicionales del país, se expanda por la casa. La música tradicional folclórica irlandesa suele incluir algunos instrumentos como el bodhran, una especie de tambor irlandés; el violín, la flauta, el tin whistle, la gaita irlandesa o la guitarra. Cantantes como Christy Moore, María Negro o Enya son algunas propuestas. Y si prefieres música irlandesa más conteporánea, la banda The Corrs nunca decepciona.
Los ingredientes principales para la fiesta ya los tienes. Derrochar la alegría irlandesa corre por tu cuenta... Y no te apures por no ser irlandés ni por estar celebrando esta fiesta a miles de kilómetros de Irlanda. San Patricio ni se llamaba Patricio ni era irlandés. Era escocés y su nombre era Maewyn Succat.
Llegó a Irlanda en pleno siglo IV escapando de unos piratas y residió allí seis años aprendiendo celta. Después ejerció de sacerdore en Francia, donde cambió su nombre a Patricius. A los 46 años regresó a Irlanda, donde hasta su muerte estuvo evangelizando a los irlandeses. Murió el 17 de marzo, de ahí la celebración. Pero antes de su muerte, construyó un pozo donde bautizaba a aquellos que se convertían al catolicismo. Para la ceremonia se ayudaba de un trébol de tres hojas, convertido hoy en el símbolo del país. Donde estuvo el pozo se erigió un templo, la actual catedral de San Patricio, en Dublín. Quién sabe, igual el año que viene, celebras 'St. Patrick's Day' visitándola.