Este teatro fue inaugurado en 1913, y su construcción fue impulsada por Esperanza Orellana, su esposo Manuel Peña y el propietario, Antonio Gallego. Se construyó en tan solo dos años, con un aforo de 1400 personas.

Este teatro, el más grande del Norte de África atrajo a numerosos artistas de la época, de diferentes orígenes, de acuerdo a la población que en aquel momento residía en la vecina Tánger. Esta ciudad, que se encontraba bajo administración internacional, atraía artistas e importantes personalidades de todas las nacionalidades, muestra de ello es que en este teatro se representaron obras como Othelo de Shakespeare o Saladin de Nagib Hadded. Por su escenario pasaron Estrellita Castro, Carmen Sevilla, Imperio Argentina, María Caballé, Catalina Berreno, Antonio Machín, Manolo Caracol, Lola Flores, Pepe Marchena o Juanito Valderrama, entre otros.

Este edificio, en la actualidad se encuentra en estado ruinoso y aunque han sido varias las propuestas de reparación y mejora, pocas se han llevado a cabo. El Teatro Cervantes, sigue dejándose morir y cerrado al público.