Para qué sirven los remaches de los vaqueros y otras curiosidades de nuestra ropa
Hoy día, la industria de la moda constituye uno de los grandes pilares económicos para muchas regiones. Lejos de aquella función primitiva de resguardar de las inclemencias climáticas y proteger la intimidad, en la actualidad se acerca más a mostrar la identidad de cada uno y expresar mensajes que van desde la absoluta rebeldía hasta el conformismo más clásico.
Usada como mensajera de un mensaje, hemos olvidado el origen de muchas de las piezas de vestir y sus componentes, los porqués a esos detalles que no son azarosos ni decorativos.
Cualquier mujer, a lo largo de su vida ha tenido ropa interior con un pequeño lacito en la zona delantera. La razón de porqué los fabricantes lo colocan no es para dar un pequeño detalle decorativo a estas prendas. En torno a este pequeño lacito existen varias teorías. Una de ellas afirma que se colocaron cuando en las viviendas no había luz eléctrica y las mujeres debían vestirse en la más absoluta oscuridad cuando se levantaban muy temprano para faenar. La otra no es mucho más glamurosa, el lazo que hoy día conocemos es la reminiscencia de una cuerda que la ropa interior traía para ser ajustada a la propietaria.
Otro de los elementos cotidianos que pasamos por alto es el pequeño bolsillo que guardan los pantalones vaqueros. Este “quinto bolsillo” nace en el siglo XIX y aunque nosotros lo usemos para guardar monedas, horquillas o pequeños elementos, fue ideado para alojar a los antiguos en los relojes de bolsillo.
En los mismos vaqueros podemos encontrar otro elemento singular por el que alguna vez nos hemos podido preguntar: los remaches. Estas piezas fueron colocadas para hacer de los vaqueros unas piezas de trabajo muy resistentes, pues están posicionadas de forma estratégica en aquellas regiones que más suelen romperse.
Con la llegada del frío, grandes y pequeños nos ataviamos con gorritos de lana que terminan en un decorativo pompón. Sin embargo, este elemento ideado por los marineros franceses no tiene por finalidad hacernos más tiernos y dulces. El pompón servía para amortiguar los golpes que los trabajadores del barco se daban en la cabeza con los techos bajos de los barcos. Con el tiempo, pasaron a ser una seña del cuerpo al que pertenecía el marinero.
Para terminar de contentar a nuestro lado más curioso, saber que el botón de las camisas femeninas se coloca a la izquierda por una razón de clase. El botón colocado a la izquierda implicaba que la doncella era quien debía abrochar esa blusa y por tanto implicaba un símbolo de estatus social.
