El pasado domingo aparecía el cuerpo sin vida de un mapache en la zona del Monte de la Tortuga. Este animal cuyo origen lo encontramos en Norteamérica es un verdadero enigma, pues no se conoce como podría haber llegado hasta nuestra ciudad. Se ha de tener en cuenta que la venta o crianza de este animal está prohibida, no así su tenencia como mascota.

La presencia de este animal, que podría ser un hecho anecdótico, debe ser estudiado pues existen ya casos en nuestro país en los que la especie, al no contar con ningún depredador, se multiplica hasta un 300% causando importantes daños medioambientales. El origen del problema aparece cuando este animal, con rasgos exóticos, es introducido en Europa desde América como mascota.

Un ecosistema tan alterado como el nuestro, no podría permitirse la existencia de este animal. Es ahora el turno de los expertos en esta materia, buscar compañeros si los hubiere del animal encontrado y de ser el caso, poner las medidas pertinente a funcionar.