La computación cuántica al detalle

Esta tecnología promete ofrecer una mayor eficiencia en la realización de operaciones y procesos complejos, inalcanzables para los actuales ordenadores.

La informática es una de las principales herramientas gracias a las cuales se sostiene el mundo moderno.


Sin ella, resultarían imposibles muchas de las utilidades que hoy consideramos imprescindibles para la gestión laboral o académica de nuestra vida personal.


No obstante, esta interacción con el medio digital, que se ha abierto paso con el discurrir de los años parece ahora acercarse a un nuevo punto de inflexión gracias a la irrupción en escena del próximo gran actor: El ordenador cuántico, aparato que aboga por desligarse de la forma en la que veníamos entendiendo la computación clásica y que promete superar con creces todo lo visto hasta ahora.


En palabras de Germán Sierra, físico adjunto al CSIC, el ordenador cuántico «es una máquina que consiste en un conjunto de átomos que llevan a cabo un proceso que equivale a tener muchos ordenadores clásicos trabajando en paralelo».


El resultado es un dispositivo que, trabajando a plena potencia, es capaz de resolver problemas y operaciones que para las máquinas convencionales requieren de una ingente inversión de tiempo y recursos.


Este novedoso tipo de ordenadores funciona según los principios de la mecánica cuántica, que pone su foco de atención en los fenómenos físicos que acontecen en el entorno microscópico: Fotones, electrones y átomos conforman una parte indispensable del armazón que sustenta esta tecnología.


Así mismo, la transmisión de información en los ordenadores cuánticos emplea los bits cuánticos o cubobits, sumamente distintos del sistema binario de bits que se usa en las computadoras ordinarias. 


Los cubobits destacan por sus llamados estados cuánticos, capacidad de almacenar grandes cantidades de datos gracias a la superposición de los tradicionales ceros y unos de la estructura binaria. 


Aunque esta nueva tecnología resulte en un futuro accesible a la población dado su escaso gasto energético, el investigador Sierra vuelve a reseñar que las expectativas a corto plazo para la computación cuántica es la de experimentar un notable perfeccionamiento.


En la carrera por liderar este espectro de la informática se encuentran inmersas compañías como Google e IBM, multinacionales que garantizan un futuro período de esplendor para un sector que será imprescindible en apenas unos años.