Verano azul: mucho más que la muerte de Chanquete
Verano azul ha vuelto este verano a nuestras televisiones, en la parrilla de las tardes de La 2. Una serie para nostálgicos que nos enseñó el valor de la amistad y cómo los veranos sirven para mucho más que montar en bicicleta. Además de enseñarnos que Chanquete nunca morirá.
La serie Verano Azul marcó el verano de muchos españoles, españoles de diferentes generaciones que o se veían reflejados en las historias de esos adolescentes o en las de sus padres. El verano de bicicletas y amores, cuevas por descubrir y enseñanzas por aprender. La playa de Nerja como escenario de un verano que nunca olvidarían.
Ni ellos ni los espectadores porque durante varios años de aquello se encargó Televisión Española, que volvía a emitir una vez tras otra la aclamada joyita televisva a la que dio luz Antonio Mercero.
Hasta que de pronto las reposiciones se disiparon y aún cuando Verano azul seguía en la mente de muchos -sobre todo si cogíamos una bicicleta en verano e instintivamente comenzábamos a tatarear la canción de la cabecera- ya eran muchas las generaciones a las que palabras como Tito, Piraña o Chanquete ni siquiera le sonaban. Bueno, la de Chanquete igual sí porque el ‘Chanquete ha muerto’ es más conocido que el ‘Franco ha muerto’.
El caso es que este verano, TVE ha debido de pensar que tal y como anda la cosa con la pandemia, e incluso con toque de queda en algunas localidades, el quedarse en casa sigue siendo el mejor plan. Y es por ello que ha optado por recuperar para su parrilla de las tardes en La 2 la mítica serie.
Pero no solo por la pandemia y por los nostálgicos, sino porque la serie cumple cuarenta años este verano. ¡Y qué mejor modo de celebrarlo! Se estrenó el verano de 1981 y puede rememorarse cada tarde, a las 20:00 horas en La 2. También disponible en la web. Una cita que incluso se convirtió en trending topic en Twitter. Porque hay sensaciones que no pasan de moda y Verano Azul, con sus más y sus menos, nos habla de esos veranos inolvidables. Casi se podría decir que es la versión retro de Luca, la película que este verano Pixar estrenó para hablar del ‘mejor verano de tu vida’.
Verano Azul es la vigesimocuarta vez que se repone en la televisión pública. Una serie que se grabó en Málaga convirtiendo la plaza de Verano Azul en un reclamo turístico, en el que puede verse (aunque decepciona un poco la verdad) el clásico barco de Chanquete en el que aquella pandilla pasó sin duda sus mejores tardes.
Y es que la serie nos enseñó desde qué era un spoiler, aunque no supiéramos que se llamaban así a por qué había que respetar el medio ambiente. Las revistas de la época adelantaron antes de su emisión la muerte de Chanquete. ¿La razón? Parece que los psicólogos recomendaron que se hiciera así para no traumatizar con el golpe a los niños.
Pero ‘Verano Azul nos habló también de que el medio ambiente había que respetarlo y de que las tradiciones había que conservarlas dándoles valor a nuestra ganadería y pesca. Que los adolescentes siempre son adolescentes sean de la época que sean; que las familias son tan diversas como la que el pescador y la pintora montaron aquel verano con toda la pandilla. Y que los amigos nos salvan, tengamos la edad que tengamos.