Un beso entre dos mujeres en ‘Lightyear’ abre la caja de la homofobia
Una escena en la que una familia formada por dos mamás se dan un beso abre la caja de la homofobia y en hasta 14 países se prohíbe el estreno de ‘Lightyear’, la película que narra los orígenes de Buzz, el entrañable astronauta de Toy Story. ¿Y aún preguntan por qué es necesario un Orgullo reivindicativo?
Nunca un beso de Disney generó tanta polémica. Ni aunque fuera un beso no consentido como el que el príncipe (¿azul?) le dio a Blancanieves para despertarla. Que el poder del hombre guapo ya se sabe que lo solucionaba todo (en Disney)...
Pero hasta Disney ha evolucionado. No tanto, parece ser, como algunos sectores de nuestra sociedad. Y es que han saltado las alarmas con el beso lésbico que aparece en una escena de Lightyear, la película que relata los orígenes de Buzz Lightyear, el juguete astronauta de la saga Toy Story.
Ni siquiera ha sido un beso apasionado. Se trata de un beso sencillo, en un contexto de hogar, entre una familia formada por dos mamás. Un beso que debería formar parte de nuestra cotidianidad pero que ha hecho (a algunos) poner el grito en el cielo. Tanto que en algunos foros se ha evitado programar la película infantil, mientras que en otros se emite alertando previamente: “Atención, te informamos que la película Lightyear tiene escenas con ideología de género”.
“Ideologías de género”, esos términos que ahora se utilizan para atacar cualquier tipo de mensaje no normativo, no heteronormativo ni patriarcal. El cartel se denunciaba en redes después de ser fotografiado en la cadena de cines ‘Cineplanet’. La compañía se ha visto obligada a pedir disculpas: “Respecto al mensaje publicado en la sinopsis de la película animada ‘Lightyear’, queremos comunicar que lamentamos este hecho que no representa nuestros valores y cultura de diversidad, equidad e inclusión, la cual promovemos como empresa”.
En respuesta a este tipo de reacciones homófobas, las redes se han llenado de ‘memes’, pero, por encima de ellos, de denuncias.
Y no solo las redes, también los medios de comunicación. Los periodistas David Cantero e Isabel Jiménez denunciaban en Informativos Telecinco que la película, estrenada el pasado 17 de junio, no se emitirá en 14 países de Oriente Próximo y Asia debido al beso entre dos mujeres. La postura de China también está por ver, pero de momento pide que se vete el beso lésbico.
“Hablamos de un referente en la astronáutica, censurado en la nueva película de Disney y Pixar por motivos que creíamos ya olvidados, retrógrados e impensables hasta el infinito y más allá”, decía Cantero, a lo que su compañera añadía: “Es la esperada historia de Buzz Lightyear, que sufre la lacra de la homofobia en los cines de hasta 14 países, la mayoría asiáticos, por un simple beso entre dos personajes del mismo sexo”.
Multitud de personas han defendido que se mantenga la escena, que se apuesta por llevar al cine la misma diversidad que existe en la vida. Pero que un beso entre dos personas del mismo sexo sea noticia y motivo de crispación nos deja aún en muy mal lugar como sociedad. Y nos da la respuesta a la pregunta que estos días hacen algunos: “¿Un Orgullo de qué? ¡Yo también quiero un Orgullo heterosexual!”. Y es que un Orgullo reivindicativo, una defensa de los derechos LGTBQI+ seguirá siendo necesaria mientras aún estos temas ocupen portadas.