De 'entretanto' a 'amelcochar' o 'acentor': repasamos algunas de las propuestas como #PalabraDelDía de la RAE

La RAE nos amplía vocabulario.

La Real Academia Española se aprovecha del medio de difusión que es Twitter para dar a conocer términos de nuestra rica lengua española que nos resultan desconocidos.

La Real Academia Española, en su propósito de acercar la lengua española a la sociedad, hace también uso de las nuevas tecnologías y las redes sociales. Es por ello que a través de Twitter, bajo el hashtags #PalabraDelDía va citando términos, algunos más desconocidos que otros y los va explicando. Una excelente manera de ir ampliando nuestro vocabulario. Porque una vez aprendidos será más fácil que sepamos en qué contextos “soltar” palabras como 'entretanto', 'amelcochar' o 'insania'.

Entretanto’, de la que hablaron el pasado viernes 6 de agosto, es un término que conocemos y que solemos usar pero sobre el que a menudo asalta la duda: ¿se escribe junto o separado? La RAE aclara que en su primera acepción, cuando funciona como adverbio para expresar el tiempo que transcurre hasta que se realiza lo que se expresa, puede escribirse junto o separado, aunque es preferible su uso como palabra única. Otras palabras que la RAE también recomienda escribir como una sola palabra son, por ejemplo, deprisa (‘rápidamente’); aposta (‘adrede’); arcoíris; asimismo (‘también’); alrededor (‘en torno a’); enfrente (‘en la parte opuesta’)...

Otros términos, sin embargo, nos son más desconocidos y no solemos utilizarlos tanto en nuestras conversaciones cotidianas. Es el caso de palabras como 'amelcochar', que igual los reposteros sí que saben qué es, pues se refiere a “dar a un dulce el punto espeso de la melocha”. De ahí que en países como México, Nicaragua o Perú se utilice como sinónimo de reblandecerse. El origen del término, explica la RAE, viene de la palabra “melcocha”, sobre la que está formado el derivado “amelcochar”,que  procede de “miel” y “cocha”, femenino de “cocho”, que es el participio irregular antiguo de “cocer”.

Acentor’ es otro de esos términos que igual nos suenan pero que no terminamos de encajar en dónde. Es un pájaro parecido al gorrión, de pico fino, plumaje castaño en la parte superior y gris en la inferior, que habita en zonas de arbustos y matorrales. Su nombre viene ‘accentor’, ‘persona que canta con otra’; de ahí el ‘cantor’, al que se le añade el ‘a’. Otros nombres curiosos de aves, también indicados por la RAE, son el de ‘cristofué’ o el de ‘agaponis’, cuyo nombre proviene del término griego ‘agápe’ (amor) y ‘órnis’ (pájaro).

Como palabras del día, la RAE también aporta términos que aún no estando reconocidos por la academia, la Academia los estudia. “Es una palabra que no está en el diccionario académico, pero la RAE tiene constancia de ella y se documenta en el Corpus del Español del Siglo XXI”, dice la RAE de términos como ‘ojiplático’ o ‘Random’.

En otras ocasiones, la Real Academia Española muestra palabras como ‘lapicera’ (pluma estilográfica, bolígrafo, portaplumas...), para aprovechar y nombrar los sinónimos: ‘Bolígrafo’, ‘lapicera’ o `lapicero’, ‘birome’, ‘boli’, ‘esferográfica’ o ‘esferográfico’... “¿Cómo llaman ustedes al instrumento para escribir que tiene en su interior un tubo de tinta especial y, en la punta, una bolita metálica que gira libremente?”, preguntan en Twitter. En definitiva, palabras que amplían nuestro vocabulario (y por lo tanto nuestra mente); y una cuenta a la que recomendamos seguir.