Y si te digo que antes el salmorejo era blanco…

Uno de los platos estrellas del verano, compitiendo siempre por la primera posición con el gazpacho, es el salmorejo. Fresco, suave y sencillo no siempre ha sido como hoy lo conocemos.

Es en el Neolítico donde parecen encontrarse las primeras sopas de pan, harina y agua, tatarabuelos del salmorejo. Desde ahí, poco a poco, fueron evolucionando siempre acorde al descubrimiento y el comercio de nuevos ingredientes.

Se estima que el salmorejo actual nace entre el siglo XIX y los comienzos del siglo XX, momento en el que se introdujo el ingrediente principal: el tomate. Hasta ese momento, este vistoso plato, había sido de color blanco por el entonces protagonista, el pan. Ahora, la versión original recibe en Córdoba el nombre de mazamorra.

España es un país rico en culturas y climas, y es por ello que en cada región podemos encontrar con los mismos ingredientes, diferentes platos. Una de las principales variedades del salmorejo es la porra antequerana – con un mayor contenido en pan-, que ocasiona disputa entre los malagueños y cordobeses siempre que se menciona el tema.

¿Qué beneficios aporta el salmorejo?

Los ingredientes de este plato –tomate, aceite de oliva, ajo, pan, vinagre y cebolla- lo convierten en uno de los platos más sanos del verano.

Un plato medio de salmorejo aporta entre 80 y 120 Kcal que proceden de los hidratos de carbonos y grasas, grasas que se derivan principalmente del aceite de oliva.

Entre los numerosos beneficios que se le reconocen encontramos que contribuye positivamente a la salud cardiovascular gracias a los ácidos grasos del aceite y el efecto vasodilatador del ajo. Además, al ser un plato que no requiere cocinado, las propiedades nutritivas de los alimentos se conservan intactas.

En verano, más que en ninguna otra temporada del año, nos apetece cuidarnos más. La dieta es una de las partes. esenciales en ello y si esto nos preocupa, debemos saber que gracias al alto contenido en polifenoles (que actúan como antioxidantes) que ayudan en la lucha contra el envejecimiento.

Viendo los beneficios del plato, solo nos queda picar un buen jamón que acompañe a este rey del verano.